Es cuando una de las arterias que lleva sangre al corazón se bloquea por un coágulo de sangre, dejando a las células del interior sin oxígeno y dañando el músculo cardíaco provocando el peligro de muerte a la persona. Entre más tiempo pase mayor será el daño al músculo del corazón.

Existen dos tipos de infarto, uno comúnmente conocido como “paro cardiaco” en el cual el corazón se detiene y deja de latir, y el infarto súbito en el que poco a poco el corazón deja de funcionar.

Los síntomas de un infarto en su mayoría de los casos son fáciles de identificar, algunos de ellos son los siguientes.

• Dolor en el pecho
• Malestar abdominal
• Dolor fuerte en brazos, cuello, mandíbula, hombro y espalda
• Dificultad para respirar
• Náuseas
• Fatiga
• Sudoración fría
• Mareos
• Ansiedad

¿Qué hacer en caso de presenciar un infarto?

Si estás ante una emergencia de esta clase lo primero que debes de hacer es llamar al servicio médico de emergencia al número 911, pedir una ambulancia indicandole al telefonista que tienes una persona que presenta algunos de los síntomas antes mencionados.

Mientras esperas que llegue el apoyo médico

Si la persona está consciente:

• Acuesta a la persona con la cabeza y los hombros elevados (utiliza almohadas o cojines) recuerda que el te va a indicar si en esa posición el esta cómodo
• Mantén una temperatura cómoda
• Afloja la ropa ajustada y quita los zapatos
• Limpia cualquier secreción por la boca
• Cerciora que las vías respiratorias están despejadas y abiertas
• Asegúrate de que la ayuda está en camino y mientras esperas puedes comunicarte con la persona apretándole las manos si no puede hablar
• Evita darle algo de comer o beber

Si la persona está inconsciente

Si la persona afectada pierde el conocimiento, hay que recostarla en posición lateral recargando su cabeza sobre su brazo, para evitar que la sangre, saliva, o la lengua, pueda bloquear la tráquea y se asfixie.

Continúa revisando su vía respiratoria y si es necesario continúa atento a cualquier movimiento preparado para reanudar el plan de acción si fuera necesario.

No se debe olvidar que la prevención es la mejor manera de vivir sanos y mantener una buena calidad de vida, por lo anterior debemos acudir periódicamente al médico a realizar controles y exámenes para detectar problemas cardíacos y recibir el tratamiento adecuado

Redacción, Carlos Andrés Reyes Gonzaléz